El miércoles,
día 5 de este mes salieron los datos de empleo y de afiliación a la Seguridad
Social de junio. Se ha batido un récord de trabajadores en activo, 20,86
millones de cotizantes. El paro ha descendido hasta los 2,68 millones de
desempleados, la cifra más baja en los últimos 15 años. Datos buenos: los
54.541 nuevos ocupados de junio son el dato más bajo desde 2015, aunque es un
mes de alta ocupación, porque se firman los contratos de servicios para cubrir
la temporada alta turística.
Si estamos ante una tendencia consolidada de desaceleración o no, se confirmará en la segunda mitad del año, que es cuando al mercado laboral le cuesta más remontar. A cierre de la primera mitad de 2023, lo que puede decirse es que la cifra de afiliados es extraordinaria: nunca antes se había registrado un aumento neto de 448.065 ocupados en un primer semestre.
Se habla ya de
un cambio de ciclo en lo laboral, aunque quizá es precipitado decirlo a estas
alturas. En lo relativo a la calidad del empleo, uno de cuyos indicadores más
claros es la temporalidad, en junio, cuatro de cada 10 contratos firmados
fueron indefinidos, cuando antes de la reforma laboral representaban uno de
cada 10. Resulta un gran avance contra la precariedad, aunque es obligado aquí
hacer una mención a los fijos discontinuos, trabajadores que entran dentro de
esta misma estadística, pero tienen menos estabilidad real que un indefinido a
tiempo completo. Se critica mucho esto por parte de la oposición, es decir que
se contabilicen como fijos y dicen que nunca se han considerado como contratos
fijos; no siempre fue así, sin duda no se leyeron las estadísticas o las
opiniones de gobiernos en tiempos atrás.
Sin embargo,
reseño algo que no se suele reseñar; ni por parte de la oposición, ni por parte
del gobierno y de los agentes sociales que firmaron la Reforma Laboral,
Los despidos
le cuestan muy poco a la patronal, con lo cual los beneficios de haber subido
extraordinariamente la contratación fija queda lastrada en gran parte por esto;
de hecho, a la patronal no le importaría que todos los contratos fueran fijos
si el despido no les costara nada. “Ahí está la madre del cordero”. Los
ejecutivos y altos cargos de las empresas se brindan sus despidos individualmente
pero el trabajador corriente solo lo puede hacer mediante la negociación
colectiva y si es barato el despido (se abarató con la reformas anteriores), y no
se ha modificado, el contrato fijo no es tan positivo como era antes de la contrarreforma
laboral; aunque sigo diciendo que en conjunto esta nueva Reforma Laboral ha
sido un avance positivo (por primera vez no ha sido hacia atrás, con recortes
de derechos, si no hacia delante y está dando buenos resultados), Feijoo lo
sabe, aunque se lo han tenido que recordar en Europa los suyos, ha tenido que
achantar la cabeza y decir que no la va a quitar como dijo machaconamente desde
que se aprobó con el PP en contra.
Mira que se
hicieron cosas raras, el PP “untó” a dos diputados de UPN, que ahora
están en su partido y uno del PP se equivocó al votar y votó a favor. Yo creo
que no se equivocó; ese diputado está imputado en varios delitos de tipo
monetario o de otras cosas y ya no se dice nada. Ahora sale tan contento por
los “medios” como un bufón, y su partido, visto lo visto, con la
sumisión a Europa de acatar la Reforma Laboral, tampoco parece que le tenga ya
mucho rencor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario