La energía es una necesidad
Es tu derecho
La imposibilidad por parte de los hogares de hacer
frente al pago de los suministros eléctricos (electricidad y luz
fundamentalmente), así como el destinar un porcentaje desproporcionado de los
ingresos para pagar estos suministros es lo que se denomina pobreza energética.
La pobreza energética, supone pasar frio en invierno y
calos en verano y, en muchos casos, habitar viviendas con humedad, además de no
disponer del mínimo necesario de agua caliente ni de suficiente iluminación.
Los hogares que se ven obligados a destinar un porcentaje desproporcionado de
sus ingresos a pagar estos suministros llegan al 16,6%, lo que equivale a siete
millones de personas, de estas, cuatro millones están en situación de pobreza
energética extrema.
Esto supone una merma grave de la calidad de vida de las personas, además de su empobrecimiento, al impedir que puedan destinar una parte mayor de sus ingresos para cubrir otras necesidades básicas y que, en los casos más graves, condenan a la exclusión social a estas personas y afectan a su salud, provocando muertes prematuras, sobre todo de personas mayores, que se calcula que podrían atender a 7.200 fallecimientos evitables si se erradicara el problema.
La pérdida de poder adquisitivo de las pensiones, hace que este problema se agrave día a día.
Nosotros, los pensionistas de CCOO, seguimos denunciando conjuntamente con la Confederación Sindical de CCOO, los continuos incrementos de las tarifas energéticas en España que solo benefician a las grandes empresas eléctricas y que nos conducen a un empobrecimiento generalizado de los pensionistas, jubilados y de los trabajadores/as.
Exigimos al
gobierno que garantice el suministro
de electricidad y gas a todos los hogares.
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